martes, 2 de septiembre de 2008

Nos quedamos llenos de recuerdos


Hace ya un mes que regresaron José María y María Eugenia. La realidad superó a la imaginación.  Es tan fácil, cuando se desea y se asumen las mejores vibras, hacernos felices unos a otros. Así fue con mis sobrinos. Los perros, los pinos, el campo, la alberca y el tobogán...todo contribuyó a que nos sintiéramos en las mejores tesituras. Gracias Joseíto y Maruchita; fueron las mejores vacaciones.

viernes, 18 de julio de 2008

La dignidad de las vacaciones


Hoy es 18 de Julio. Samuel y yo saldremos de vacaciones. Nos quedaremos en casa junto a los pinos que nos acompañan diariamente desde hace unos meses; con los perritos que adopté al llegar a aquel bosque. También nos acompañarán José María y María Eugenia, mis sobrinos queridísimos. Vendrán desde Caracas a visitarnos por diez días que queremos se conviertan en años de alegría.

Siempre he creído que la familia es aquella que construimos gracias a las afinidades y coincidencias, y no a la sangre. Sin embargo cuando ambas cosas coinciden es maravilloso poder disfrutar de aquellos a quienes amas. Tienen 11 y 7 años, pero entre nosotros hay una cercanía y un afecto milenario.

Animo a todos los que en estos meses han salido, salen o saldrán de vacaciones a que aprovechen el aire freco o cálido para olvidar sinsabores laborales o rutinas desgastantes. Nosotros, con toda seguridad, haremos lo mismo.

martes, 1 de julio de 2008

Congresos Académicos: ¿El mejor negocio?

La semana pasada estuve en un Congreso de Literatura. Los que todavía pensábamos que las bellas artes y las humanidades permanecían al margen de ambiciones económicas y mantenían un relativo altruísmo, propio de su condición elevada y prácticamente espiritual, ya habíamos entendido que el capitalismo a ultranza no permite tales deslices. Sin embargo éste último congreso en el que participé me ha mostrado abiertamente que nuestra profesión encaja descaradamente en el modelo neo-liberal más puro.

Llegas al congreso; haces una fila interminable porque los organizadores están realmente desorganizados y no logran agilizar los procesos de pagos y expedición de recibos. Entregas una cifra realmente alta para poder participar como ponente; es decir, pagas para poder mostrar a otros lo que has venido trabajando. Más adelante, además, debes reducir tu lectura a quince minutos. No importa desde cuál lugar del planeta te hayas trasladado: tienes sólo quince minutos para mostrar el producto de días o meses de investigación. ¿Eso es un congreso? ¿Dónde quedó la honestidad y la ética que debe acompañar a todo profesional, a todo estudioso que aprecie la Academia?

miércoles, 11 de junio de 2008

Cuando muere un gran poeta

La muerte de Eugenio Montejo ocurrida hace unos días nos ha dejado a todos los que lo conocimos, más aún, a los que tuvimos el privilegio de maravillarnos con sus versos, una sensación de acabamiento; como si la tristeza cayera silenciosa entre los resquicios de sombras, calles y avenidas. Porque Montejo no sólo le hablaba a su interior; también reflexionaba sobre el mundo; sobre el paso del tiempo y las discordias. Entendió al hombre en su inevitable fragilidad y desde ella le habló como si quisiera consolarnos.
Poeta, tu palabra sigue aquí, nos convoca ahora, mañana, después.
Les trascribo unos versos extraordinarios:
Cruzo la calle Marx, la calle Freud; ando por una orilla de este siglo,
despacio insomne, caviloso
espía ad honorem de algún reino gótico,
recogiendo vocales caídas,
pequeños guijarros
tatuados de rumor infinito.
La línea de Mondrian frenta a mis ojos
va cortando la noche en sombras rectas
ahora que ya no cae más soledad
en las paredes de vidrio.
Cruzo la calle Mao, la calle Stalin; miro el instante donde muere un milenio
y otro despunta su terrestre dominio.
Mi siglo vertical y lleno de teorías...
mi siglo con sus guerras y posguerras
y su tambor de Hitler allá lejos,
entre sangre y abismo.
Prosiglo entre las piedras de los viejos suburbios
por un trago, por un poco de jazz,
contemplando los dioses que duermen disueltos
en el serrín de los bares,
mientras descifro sus nombres al paso
y sigo mi camino

viernes, 30 de mayo de 2008

ESTILOS POÉTICOS

Sin ánimo de pontificar, sin el deseo de asemejar estas líneas a un discurso mínimamente didáctico, querría evocar de nuevo a la poesía. Creo que es muy enriquecedor entrar a un blog en el que se invita al visitante a realizar buenas y variadas lecturas. Una de ellas es el poema que les presento a continuación del poeta cubano Luis Rogelio Nogueras, ya fallecido. El poema se publicó en el libro Encicloferia (1999) de Ediciones Fin de Siglo.
La mayor parte de la obra poética de Luis Rogelio corresponde al estilo de la llamada "Poesía conversacional"; versos sencillos, desnudos de mayores artificios retóricos que parecieran burlarse de ellos mismos, de su oficio, de lo rimbombante para ubicarnos en nuestra cotidianidad llana y, al mismo tiempo, hermosa. Ahí les va el poema, espero que lo disfruten:
Pérdida del Poema de Amor llamado "Niebla"
Ayer he escrito un poema magnífico
lástima
lo he perdido no sé donde
ahora no puedo recordarlo
pero era estupendo
decía más o menos
que estaba enamorado
claro lo decía de otra forma
ya les digo era excelente
pero ella amaba a otro
y entonces venía una parte
relamente bella donde hablaba de
los árboles el viento y luego
más adelante explicaba algo acerca de la muerte
naturalmente no decía muerte decía
oscura garra o algo así
y luego venían unos versos extraordinarios
y hacia el final
contaba cómo me había ido caminando
convencido de que la vida comienza de nuevo
en cualquier esquina
por supuesto no decía esa cursilería
era bueno el poema
lástima de pérdida
lástima de memoria

viernes, 23 de mayo de 2008

¿clases de literatura?

Amo la literatura. Es algo real, que siento desde que era niña y que ha tenido sus claros y sus oscuros; durante algunos años la abandoné; o ella a mí, no sé bien quien dio el primer paso. La verdad actual es que he vuelto a ella con la felicidad de encontrar el amor perdido que se cree irrecuperable. El compromiso asumido de concluir mi doctorado -para mí el mayor reto profesional que he enfrentado- llenó de aire fresco mi entusiasmo por leer y leer interminablemente; y ahora, incluso diría, gracias a este blog, de escribir algo que vaya más allá de la investigación, de los oficios, de los artículos por publicar...
Por azares o entuertos del destino, o de quienes lo construimos, me vi en la necesidad de visitar la Facultad de Ciencias Políticas y Administración Pública de mi Universidad pues allí se cursa la Licenciatura en Comunicación. Soy de letras pero la facultad de Humidades tiene tales aboyaduras para la inclusión de maestros, tal sobresaturación de intereses que me vi forzada a mirar otros horizontes. Afortunadamente encontré respuestas positivas que hasta ahora sigo conservando. Las asignaturas que dictaba estuvieron siempre asociadas a la literatura; tomando en consideración mi inclinación a la misma, el curso se diseñaba con la mirada puesta en novelas, poemas o ensayos que deseaba leyesen mis alumnos para que se dieran cuenta del craso error que cometían al decirme que la literatura senciallamente les aburría.
Hoy después de algunos años me veo en la grata coyuntura de haber sido nombrada asesora de tesis de una ex-alumna que conocí en las clases de la licenciatura en comunicación y que, inclinada por la literatura, ha sido aprobada para realizar estudios de Maestría en Literatura. Cuando pasan estas cosas, cuando lo que hiciste tiene a la larga o a la corta, repercusiones muy positivas, comprendes que este mundo lleno de entuertos y rutas zigzagueantes igualmente nos depara paraísos pequeños decorados por lo mejor de nosotros mismos. Felicidades, Nelly, yo también siento que es maravilloso.

poemas, más poemas


Les transcribo un poema de un poeta cubano, de cuyo nombre sí quiero acordarme pero no recuerdo en este momento. Sin embargo no quiero privarles de la lectura de sus versos. Es sencillo y muy hermoso. Ahí les va:


"Ya que emprendimos el viaje,

¿a dónde iremos, camino?

¿a donde quiera el destino?

¿donde nos lleve el oleaje?

Para el viaje yo no traje

mucho más de lo que ves:

mis lentos, cansados pies,

estas manos con que escribo,

el corazón con que vivo

camino, y lo que me des."

miércoles, 21 de mayo de 2008

Calidad de vida

Depararnos un presente armónico y un probable futuro en el mismo tenor es, evidentemente, una tarea que lleva la vida entera pero que, muchas veces, no asumimos como prioridad.

Hace un año y medio alcancé, después de largos años de esfuerzo, mi grado de doctora en Letras. Bueno, bueno, ser doctor es una palabra tan alta, que abarca tanto conocimiento, que el nivel ya logrado es meramente alegórico. Sin embargo, se trata más bien de esa llave que abre espacios de la Academia antes inalcanzables. Mi trabajo consiste en estudiar, investigar, leer, y ser, fundamentalmente, trasmisor de conocimiento. Todo lo que enumeré me encanta realizarlo; qué mayor logro que disfrutar trabajando. Pero, he ahí siempre el bendito pero, desgraciadamente la amiba llamada burocracia-servilismo-nuevos cargos se encarga de borronearnos la sonrisa, el disfrute para traernos a ese mal llamado mundo cruel en el que nos ubica para decirnos que ese tesoro al que nombramos como "calidad de vida" debe ser espantado.

Aún así, y como la vida no es sólo trabajar, hemos tenido la maravillosa suerte de poder construir una casa en un lugar de ensueño. Está en medio del bosque; rodeada de pinos centenarios, vacas, caballos, borregos...todo un espectáculo. Desde entonces el refugio-paraíso se llama Cañada de Alférez: allí encontramos el Santo Grial: nuestra calidad de vida encontró coordenadas, cartografías que nos diseñan una vida serena, donde la naturaleza recobra presencia y nos recuerda que siempre podremos alcanzar mejores gestos en nosotros.

Experimentos del lenguaje

El ejercicio del lenguaje como experiencia estética es una de las grandes riquezas que la literatura ofrece. Palimsestos, anagramas...y relatos con el tiempo que retrocede son actividades que el ludismo literario otorga a quienes, genialmente, logran desarrollarlo. Les anoto este cuento que leí en un blog de literatura y que éste a su vez extrajo de una antología de Tusques Editores. Disfrútenlo:

Un feliz regreso

A las cuatro en punto sus manos fueron liberando el cuello de la mujer. Luego le abrochó la blusa roja aún manchada de barro, mientras ella abría sus mortecinos ojos. Después la cogió de los brazos y la arrastró por un lodazal, insensible a sus agonizantes súplicas, hasta alcanzar el taxi. Tras un blando forcejeo, a las cuatro menos cuarto la introducía en el maletero y arrancaba el coche. A las tres y media se detenía a la entrada de un camino. Antes de cambiarla al asiento trasero, el taxista la golpeó con saña en la cabeza. A las tres y cuarto llegaban ala ciudad. Poco a poco la mujer recuperaba la calma y la pulcritud de su aspecto físico. A las tres el taxi se paraba ante la verja de una casa y la mujer descendía del coche con una sonrisa nerviosa pero no exenta de cortesía. A las tres menos cuarto se ponía una blusa roja y a las dos y media telefoneaba a su marido. Ahora mismo iba a verlo a la fábrica, acababa de recibir una inquietante llamada y tenía miedo. A las dos y cuarto una voz anónima le comunicaba que con toda seguridad a las cuatro en punto estaría muerta.

Francisco Corrales Fernández. De Galerías de Hiperbreves. (Tusques Editores)

martes, 13 de mayo de 2008

En memoria de mi maestro Basilio Tejedor

Hace unos días encontré un poema de Arquíloco de Paros; ese griego que en el 680 antes de Cristo escribió estas hermosas líneas que tienen tanto de valor, humildad y valentía (nunca están reñidas estas tres virtudes). Lo transcribo recordando la memoria de uno de esos pocos Maestros que nombramos con mayúsculas porque nos enseñaron a ver la vida con pasión y con mucho de humanidad. A Basilio Tejedor estas palabras que él me mostró una vez y que no he dejado nunca de recordar:

"Corazón, corazón, si te turban pesares invencibles ¡arriba!, resístele al contrario ofreciéndole el pecho de frente.

Y al ardid del enemigo oponte con firmeza.

Y si sales vencedor, disimula, corazón, no te ufanes, ni de salir vencido e envilezcas llorando en casa, recuerda que en la vida impera la alternancia".

De burocracias y otros menesteres

Transmitir el conocimiento, leer, entender mejor el mundo, adentrarse a él sin miedos ancestarles...es lo que, quizás, muchos deseemos hacer a lo largo de nuestra vida. El azar, la buena suerte o como quiera llársele me permitieron encontrar un espacio en ese mundo de la Academia que tanto aprecio pero que cada día se contamina más de basura que no le corresponde, que perfila en ella una silueta distorsionada y gris.



Vales, sabes y ganas en la medida en que acumulas cartones que dicen de un curso, conferencia o taller que aparentemente llevaste a cabo. Más aún, estás presente laboralmente hablando si, y sólo si firmaste en la mañana, al mediodía, en el comienzo de la tarde y al finalizar la misma. No importa si firmaste, entraste a tu cubículo y te reclinaste a dormir una buena siesta, o si, lúdicamente, utilizaste tus horas frente a la pantalla de tu computadora viendo una película, chateando o navegando en la red. La productividad del académico que marca en definitiva su buen nivel, y en consecuencia, el de la Universidad pareciera estar en un octavo término.



El último oficio recibido nos indicaba con lujo de detalles cómo tendríamos que actuar en las quincenas...creo que el próximo oficio nos mostrará el diseño del nuevo uniforme...pobre academia, qué será de ti si nuestra burocracia no cambia.